El cinematógrafo
El cinematógrafo fue patentado el 13 de febrero de 1895. Ese mismo año, los Lumière rodaron su primera película, La sortie des ouvriers des usines Lumière à Lyon Monplaisir (Salida de los obreros de la fábrica Lumière en Lyon Monplaisir). Fue presentada el 22 de marzo de 1895, tres días después del rodaje, en una sesión de la Société d'Encouragement à l'Industrie Nacional en París.
Tras diversas presentaciones en sociedades científicas, en la Universidad de la Sorbona, en Bruselas y otros lugares, los Lumière decidieron hacer una exhibición comercial de las películas que habían rodado. Finalmente, lo celebraron en el Salon indien du Grand Café, un sótano en el número 14 del Boulevard des Capucines, el 28 de diciembre de 1895. Se proyectaron, además de Salida de la fábrica Lumière, otras películas como Llegada de un tren a la estación de la Ciotat y El regador regado, en la que aparece el jardinero Jean-François Clerc. Así, con este catálogo, el cine comenzó su historia a modo de documental, como testigo objetivo de la vida cotidiana.
Su posición económica y el interés que mostraban hacia la ciencia les hizo menospreciar las posibilidades comerciales de su invento, por lo que finalmente abandonaron la producción cinematográfica.Aunque los hermanos dijeron «el cine es una invención sin ningún futuro», aprovecharon todo lo que el nuevo invento les ofreció para montar un negocio rentable. Los Lumière enviaban un cinematógrafo y un operador donde fuera requerido, por ejemplo, a la coronación del zar Nicolás.
La primera proyección
El 28 de diciembre de 1895 tuvo lugar la primera exhibición con público del cinematógrafo Lumière en el Salon indien del Grand Café, en el número 14 del Bulevar de los Capuchinos de París. El programa constaba de diez películas de 15 a 20 metros cada una. Estas películas estaban realizadas por Louis Lumière e interpretadas por sus familiares y amigos. La duración total fue de 20 minutos y el precio de las entradas fue de 1 franco.
Las películas proyectadas fueron:
- La Salida de los Obreros de la Fábrica Lumière (La Sortie de l'usine Lumière à Lyon)
- Riña de Niños (Querelle de Bébés)
- La Fuente de las Tullerías (Le Bassin des Tuileries)
- La Llegada de Un Tren (L'arrivée d'un Train)
- El Regimiento (Le Régiment)
- El Herrero (Le Maréchal-Ferrant)
- La Partida de Naipes (Partie d'écarté)
- Destrucción de las Malas Hierbas (Mauvaises Herbes)
- Derribo de Un Muro (Le Mur)
- El Mar (La Mer)

Las primeras proyecciones tuvieron unos ingresos bastante mediocres. En la primera, concretamente, se consiguieron un total de 35 francos. No obstante, esos primeros 35 espectadores propagaron por toda la ciudad la noticia de aquello de lo que habían sido testigos. Esta publicidad de boca/oreja suplió de forma eficaz la falta de prensa y pronto multitudes se congregaban para acceder a las proyecciones. Después de la inauguración, se fijó el precio de 1 franco. Las proyecciones duraban 25 minutos y se sucedían de media hora en media hora. Cada película duraba aproximadamente un minuto.

Para renovar los programas, que en los primeros días de enero de 1896 habían incorporado El regador regado (L'arroseur arrousé), primer filme narrativo y cómico de la historia del cine, los hermanos Lumière debieron reclutar operadores a los que les era confiada la realización y la proyección de películas.
Después del triunfo en París, se abren en el transcurso de los dos años siguientes cuatro salas de proyección nuevas en la capital francesa, además de una en la ciudad deLyon.
Expansión internacional
El cinematógrafo recibió una muy buena acogida en gran parte del mundo. Los hermanos Lumière hicieron llegar su invención hasta países tan lejanos como la China o laIndia. En Europa, se exhibió en ferias y se usó como entretenimiento en locales de vodevil. Aunque el vodevil se relaciona normalmente con la clase media, este aparato consiguió una gran popularidad en todas las clases sociales.
En cuanto a su expansión hacia los Estados Unidos, el operario de los Lumière Félix Mesguich fue el encargado de organizar la primera proyección en el Keith’s Theatre de la ciudad de Nueva York. En este primer contacto, los espectadores respondieron con entusiasmo. Rápidamente otros pueblos y ciudades pedían poder acoger las proyecciones del cinematógrafo, pero esta demanda era imposible de satisfacer para los Lumière. Esta imposibilidad de satisfacerla junto con la política de aislamiento del entonces presidente William McKinley propiciaron la aparición de otras máquinas para hacerles la competencia. En enero de 1897, el operario F. Mesguich fue arrestado mientras grababa en la calle con el pretexto de que no tenía permiso para hacerlo. En junio del mismo año, la administración de aduanas declaró irregular la entrada en el país del material necesario para las proyecciones. Estos hechos acabaron por provocar la retirada del cinematógrafo del mercado estadounidense.
No hay comentarios:
Publicar un comentario